domingo, 6 de noviembre de 2011

Otra profunda reflexión sobre el arte

Parece que en Alemania una empleada de la limpieza se ha cargado una instalación de Kippenberger (Una bañera de caucho sobre tablas de madera) porque creía que estaba sucia. Dicha obra estaba asegurada en 800.000 Euros. Seguramente a ella la habrán despedido.

Y he aquí la reflexión, fruto del estudio y del analisis: Cuando sea un artista famoso de mi intestino saldrá una mierda de por lo menos kilo y medio que espero poner en una urna y que se asegure en miles de millones. Pobre de aquel que ose tocarla; se la comerá enterita, en la clausula del seguro pondré que quien lo haga será fusilado por 4 eunucos desnudos.

He dicho.

................
Luís.

No hay comentarios:

Publicar un comentario